Rolls-Royce ha revelado el Black Badge Spectre, un supercoupé totalmente eléctrico que fusiona potencia, opulencia y tecnología de vanguardia. Como el Rolls-Royce más potente de la historia, este gran turismo inaugura una nueva era sin perder la esencia artesanal que define a la marca.
Construido sobre la exclusiva Arquitectura de Lujo, su estructura de aluminio garantiza una resistencia y agilidad excepcionales, logrando una rigidez un 30% mayor que en cualquier otro Rolls-Royce. Su sistema de propulsión eléctrica con doble motor entrega una impresionante potencia de 584 hp y 900 Nm de torque, permitiéndole acelerar de 0 a 100 km/h en solo 4.1 segundos. Además, el innovador sistema de suspensión Planar asegura el icónico paseo en alfombra mágica, brindando un manejo sin esfuerzo y un confort incomparable.
Impulsado por una batería de iones de litio de 102 kWh, el Black Badge Spectre ofrece una autonomía de 428 km, ideal para clientes que buscan exclusividad y rendimiento. Su sistema de frenado regenerativo optimiza la eficiencia sin comprometer la fluidez de conducción característica de la marca.
En su interior, la arquitectura digital SPIRIT integra lujo y tecnología, permitiendo a los propietarios personalizar cada detalle, desde los instrumentos hasta funciones remotas a través de la aplicación Whispers. Por otro lado, las puertas de suicidio más grandes jamás instaladas en un Rolls-Royce, fabricadas en aluminio, funcionan con un sistema de asistencia motorizada.
Más que un automóvil eléctrico, el Black Badge Spectre es una declaración de prestigio y un testimonio del compromiso de Rolls-Royce con la innovación.
Fotos: cortesía.
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